El microaprendizaje es una metodología educativa en la que el contenido se entrega en porciones pequeñas y fáciles de digerir, lo que permite a los alumnos absorber la información de manera rápida y eficiente. Podemos definirlo como una estrategia educativa que proporciona contenido en ráfagas pequeñas y específicas, que suelen durar de 3 a 5 minutos.
El microaprendizaje se distingue por su enfoque preciso y accesibilidad, lo que permite a los usuarios consumir conocimientos en cualquier momento y desde cualquier lugar. Los materiales se ofrecen típicamente en una variedad de formatos, incluyendo cortometrajes, infografías, breves artículos, cuestionarios interactivos y podcasts. Esta estrategia aborda el deseo moderno de absorber conocimientos rápidamente, adaptándose a estilos de vida acelerados y horarios agitados.
El microaprendizaje está transformando la entrega y recepción de la educación en la era digital. Su uso en plataformas de aprendizaje en línea y aplicaciones móviles permite un aprendizaje continuo, especialmente para personas con limitaciones de tiempo. Por ejemplo, un profesional puede ver un video educativo durante su trayecto, mientras que un estudiante puede utilizar tarjetas de estudio digitales para repasar conceptos cruciales antes de un examen.
Las ventajas del microaprendizaje incluyen una mayor retención de la información porque el contenido conciso es más fácil de retener y repasar. Además, su flexibilidad permite un aprendizaje personalizado que se adapta a las necesidades e intereses específicos de cada usuario. Esta práctica también fomenta la auto-motivación al proporcionar resultados inmediatos y tangibles que refuerzan la mejora continua.
